Con más de setenta años, Isaías aún espera a su hijo desaparecido. Lo espera desde su vereda, rodeado de animales y con vista a un cananguchal caqueteño, en la misma casa donde lo vio por última vez hace más de veinte años.
Para Isaías, emprender el largo viaje para entregarle a la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) una muestra biológica no solo significa tomar múltiples transportes, sino también abandonar sus animales, su hogar y hacer un enorme esfuerzo físico para llegar junto con su nieto hasta la sede de la Unidad de Búsqueda en Florencia.
Para garantizar sus derechos, la UBPD prioriza las tomas de muestra biológica domiciliaria a personas mayores, que tienen problemas de movilidad o que viven en zonas de difícil acceso.
Gracias a eso, la de Isaías es una de las más de 1.200 muestras biológicas tomadas por el equipo de trabajo territorial de la Unidad de Búsqueda en el Caquetá.
Invitamos a todas las personas buscadoras a que se pongan en contacto con la Unidad de Búsqueda. Mientras lo hacen, nuestro equipo de investigación humanitaria y extrajudicial continuará buscando a aquellas y aquellos que desaparecieron en el contexto del conflicto, incluso si aún no cuentan con una solicitud de búsqueda o una muestra biológica.