El trabajo articulado entre la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD) y la Corporación Humanitaria Reencuentros, con el apoyo de la Cruz Roja Internacional, permitió que el cuerpo de Álvaro Alfonso Cerpa Diaz regresara con sus seres queridos en la ciudad de Montería, en Córdoba, luego de 16 años de búsqueda incansable.
De acuerdo con la investigación humanitaria y extrajudicial realizada por la Unidad de Búsqueda, Álvaro falleció en octubre de 2008 en medio de acciones del conflicto armado desarrollado en la región de San Juan del Losada, ubicada entre los departamentos de Meta y Caquetá. Después de estos hechos, su cuerpo fue trasladado al cementerio municipal de San Vicente del Caguán, lugar en el que permaneció por 14 años.
Durante sus años de búsqueda, los seres queridos de Álvaro probaron diferentes maneras para recuperar el cuerpo de su ser querido. Sin embargo, por temor a amenazas o estigmatizaciones no pudieron avanzar ni tener muchos resultados.

Las respuestas, que por años estuvo esperando la familia, empezaron a consolidarse en 2020, cuando la Corporación Humanitaria Reencuentros entregó la solicitud de búsqueda a la UBPD. Después de ese momento, la entidad llevó a cabo un proceso de investigación extrajudicial y confidencial que le permitió a un equipo técnico forense realizar en 2022 la primera fase de intervención del cementerio municipal de San Vicente del Caguán.
En la acción fueron recuperados 18 cuerpos que corresponderían a personas desaparecidas en acciones del conflicto armado desarrollado en esta región del país. Casi dos años después de la recuperación, el Instituto Nacional de Medicina Legal y Ciencias Forenses confirmó la identidad de Álvaro entre los cuerpos recuperados.
Ahora, 16 años después de su fallecimiento, la familia Cerpa pidió reunirse en Montería, en Córdoba, para recibir dignamente el cuerpo de Álvaro y así encontrar el alivio, las respuestas y el cierre que por tanto tiempo estuvo esperando.

«Para mí esta entrega digna es cerrar un ciclo y que esos sentimientos de tristeza y pérdida que embargan a mi familia, que se acrecientan por no tener sus restos y un lugar donde visitarlo, es necesario darles un cierre. Es muy importante porque vamos a cerrar un ciclo, vamos a tener la tranquilidad que las personas merecen», expresó Diana Cerpa, hija de Álvaro Alfonso.
El espacio solemne, que reunió a la familia sanguínea y social de Álvaro, permitió que se intercambiaran anécdotas de sus épocas de niñez, juventud y liderazgos que lo llevaron a dejar un legado en todas las personas que le conocieron.
«Gracias a Reencuentros y a la Unidad de Búsqueda, conformados por seres humanos maravillosos, que nos han acompañado, nos han dado su aprecio, su cariño y su respeto en este proceso», agregó la hija de Álvaro.

Para contribuir con el alivio del sufrimiento de más familias que aún no cuentan con información acerca del paradero de sus seres queridos, la Unidad de Búsqueda hace un llamado a que todas las personas que cuentan con un ser querido desaparecido o tengan información que contribuya a la búsqueda de una persona desaparecida se acerquen a cualquiera de los 29 puntos de atención físicos a nivel nacional.
En Montería, la sede está ubicada en la carrera 6 # 62B-32 (oficinas 502 y 503 del Centro de Negocios Sexta Avenida – barrio La Castellana) y se puede contactar a través de las líneas 3162868799 y 3156558972. Por su parte, en Caquetá pueden acercarse a la carrera 4B # 15C-05 (piso 1 – oficina 101, barrio Porvenir) o comunícate al teléfono 3162810740. La información proporcionada es confidencial y extrajudicial, siempre con el objetivo de contribuir a la búsqueda humanitaria.