A un lado de la pantalla, Gloria Galindez daba unas instrucciones. En la otra, Libia Franco las seguía. Gloria desde la oficina de Nivel Central, en Bogotá, de la Unidad de Búsqueda de Personas dadas por Desaparecidas (UBPD). Libia en un salón con paredes blancas en Madrid, España. Gloria, que es funcionaria de la entidad, le explicaba detalladamente a Libia cómo tomar una muestra de sangre de la que se extraerá el ADN de una persona. Libia, vestida con un traje quirúrgico -bata, guantes y gorro-, estaba junto con una joven buscadora que reside en Madrid, tomándole una muestra de sangre que aportará al proceso de búsqueda en Colombia de su papá.
La búsqueda humanitaria y extrajudicial que lidera la UBPD trasciende fronteras. Bajo esa premisa y en el marco de la Red de Apoyo Operativo para la Búsqueda, a finales de octubre de este 2025 se logró la primera toma de muestra de sangre para fines de identificación genética por parte de una organización de víctimas que se cuentra en el exterior. Detrás de este hito hay todo un proceso de preparación y formación donde han participado activamente la entidad y las familias buscadoras que viven fuera del país y que tienen a un ser querido desaparecido en Colombia.
El Grupo Europa Abya Yala, que reúne a diferentes familias y personas buscadoras de Colombia que se encuentran en el exilio en Europa, es una de las organizaciones de víctimas que hacen parte de la Red de Apoyo, una estrategia de la UBPD para fortalecer los procesos de búsqueda a través del intercambio de saberes y conocimientos, así como consolidar las capacidades individuales y colectivas de quienes buscan a sus seres queridos desaparecidos.
A la par, Abya Yala y la entidad, con el apoyo del Consulado de Colombia en Madrid, organizaron el encuentro internacional ‘Colombia tras las fronteras: rompiendo el silencio de la desaparición’, celebrado el pasado 17 y el 18 de octubre. Contó con dos jornadas: una donde se dialogó sobre los retos de buscar fuera del país y otra enfocada en aprender herramientas para apoyar la búsqueda humanitaria y extrajudicial, como la toma de muestras de sangre o la presentación de solicitudes de búsqueda. En esos espacios, Libia Franco participó.
Libia hace parte de Abya Yala y también es persona buscadora: por cielo y tierra, sin descanso, busca a sus padres, Libia Suárez y Juber Franco, quienes desaparecieron en la frontera entre Colombia y Venezuela. Actualmente vive en Madrid. En el encuentro aprendió a preparar el sitio para tomar la muestra, la manera en que se manipulan las tarjetas FTA -especiales para la recolección de material biológico- y la forma de colocar las gotas de sangre en la papeleta.
A una de las jornadas del encuentro asistió Mayra Bedoya. Ella vive en Madrid y busca a su padre, quien desapareció en el Eje Cafetero a causa del conflicto armado. Su mamá, en Colombia, vio una publicación en redes sociales sobre el evento y le dijo que asistiera. Recibió la información de la UBPD y se acercó a los funcionarios de la entidad. Les dijo que estaba interesada en dar su muestra de sangre, con la esperanza de encontrar a su ser querido gracias a la identificación genética. Sin embargo, no disponía del tiempo.
Pero gracias a la formación brindada por la Red de Apoyo Operativo y la jornada de herramientas que se proporcionó en el encuentro, se logró obtener la muestra de sangre de Mayra.
Libia, días después del encuentro, asumió esa tarea: apartó una sala en Madrid, para que Mayra estuviese en un ambiente privado y tranquilo durante la toma de muestra; y preparó los insumos con los que recolectará las gotas de sangre. Hizo una videollamada con Gloria, quien la guió con paciencia en el proceso. Le hizo el pinchazo a Mayra en su dedo índice derecho y en una tarjeta FTA recogió la muestra. Seis puntitos rojos que podrían dar con la verdad y el alivio del dolor para una familia buscadora.
Durante la videollamada, Gloria le explicó a Mayra que la construcción del ADN de una persona requiere del 50 por ciento de información genética de la madre y el 50 por ciento del padre, por lo que será necesario tomar también la muestra de su madre y de su abuela para avanzar en la búsqueda.
Cuando Libia finalizó la toma de muestra y se verificó que todo estuviera en orden, la guardó en un sobre y se inició la gestión para enviarla a Colombia de manera segura para realizar los análisis correspondientes. Se espera que llegue pronto a la UBPD para continuar con el proceso de búsqueda del padre de Mayra.
Este momento marca un hito para la búsqueda humanitaria y extrajudicial en el país: lograr una toma de muestra a distancia, superando dificultades técnicas y logísticas. Así se reafirma que la búsqueda se extiende más allá de nuestras fronteras.
A la fecha y de acuerdo con las cifras de la Unidad de Búsqueda, en el exterior hay 446 personas buscadoras colombianas, las cuales anhelan encontrar a 437 víctimas de este flagelo por el conflicto armado en el país. Latinoamérica y el Caribe es la región del mundo donde más personas buscadoras existen, con 207 registros; le siguen Europa, con 149, y Norteamérica, con 82.
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