- A finales de marzo de 2010 fue desaparecido después de llegar a Medellín a visitar una tía y buscar quién le atendiera algunos problemas de salud.
- El 14 de diciembre de 2021 la Unidad de Búsqueda recuperó su cuerpo en el Jardín Cementerio Universal de Medellín.
- En el Norte de Antioquia hay un universo de 1.383 personas dadas por desaparecidas.
Medellín, 5 de octubre de 2023 – Hace cuatro años una llamada de la Fiscalía le confirmó a la familia que José Donaldo estaba muerto y que su cuerpo fue inhumado en el 2010 en el Jardín Cementerio Universal de Medellín.
“La búsqueda de mi hermano José Donaldo para mí significó esperanza, aunque nosotros como familia esperábamos encontrarlo con vida”, dijo Fanny, una de sus hermanas, al recibir el cuerpo en Ituango.
La última vez que lo vieron sus familiares fue el 29 de marzo de 2010, cuando tenía 33 años. En ese tiempo salió de la vereda en la que vivía con la esperanza de que en Medellín un médico lo revisara ante los olvidos repentinos y dolores de cabeza que estaba presentando. Se alojó en la casa de un familiar en el barrio San Pablo, en la zona nororiental de Medellín. Pudo comunicarse con su mamá, quien le había prestado un celular para que estuviera en contacto. Habló con ella, por última vez, el 31 de marzo. Era miércoles santo. Dijo que realizaría unas diligencias y nunca más supieron de él, hasta hace cuatro años que les confirmaron que había muerto.
José Donaldo fue inhumado en el Cementerio Universal el 21 de mayo de 2010 como un cuerpo no identificado (CNI), luego de mes y medio de que su cuerpo fuera hallado en el barrio La Quiebra, en la Comuna 13. En noviembre de 2011 Medicina Legal confirmó su identidad. Él era padre de tres hijos y se dedicaba a labores agrícolas en Ituango.
En todos estos años la familia guardó la esperanza de que estuviera vivo. Incluso hubo hechos que alimentaron esa ilusión. En una ocasión la familia recibió una llamada desde el celular que José Donaldo llevaba consigo. Se identificaron como supuestos integrantes de un grupo armado, conformado luego de la desmovilización de los grupos de autodefensas entre 2003 y 2006. Aseguraron que lo tenían consigo, incluso escucharon unos quejidos de fondo. Les pidieron ocho millones para devolverlo. Sin embargo, la familia no pudo reunir ese dinero.
El padre de José Donaldo viajó a Medellín a entregar una suma menor. Un joven recibió el dinero, pero no le explicó dónde estaba su hijo, solo respondió que le “dijeron que recogiera un encargo”. Las extorsiones continuaron, pero José Donaldo ya había fallecido.
Las esperanzas se mantuvieron. Alguien le contó a la familia que habían visto a José Donaldo en Urabá, incluso un brujo les dijo que estaba vivo.
Todo cambió en 2021 cuando la Fiscalía los llamó y les confirmó su muerte. El 14 de diciembre de ese año, la Unidad de Búsqueda exhumó su cuerpo y el 15 y 16 de septiembre de 2023 hizo la entrega digna a su familia en Ituango.
“Trece años después podemos estar con mi hermano, no físicamente, pero sí lo tenemos con nosotros. Nos sentimos muy afortunados de poder darle una sepultura en su tierra natal”, dijo su hermana Fanny.
Gloria María Araque González, coordinadora de la Unidad de Búsqueda en Medellín, aseguró que con esta entrega están “honrando el camino de la búsqueda que la familia emprendió por tanto tiempo y estamos garantizando su derecho a la verdad”.
José Donaldo fue inhumado en una bóveda a la espera del traslado del cuerpo esqueletizado de su madre, quien murió hace cinco años esperando el regreso de su hijo.
“Para otras personas que pasan por las mismas circunstancias, mi mensaje es que no pierdan las esperanzas, que luchen, que insistan, que hagan lo posible para encontrar a sus familias. Nos sentimos agradecidas con la Unidad de Búsqueda, gracias a ellos hoy estamos con nuestro hermano”, agregó Fanny.
Este caso pone de presente que si bien José Donaldo es oriundo del Norte de Antioquia, su desaparición y hallazgo ocurrió en el Valle de Aburrá, subregión que tiene un reporte de 4.326 personas dadas por desaparecidas, algunas de ellas inhumadas como cuerpos no identificados o cuerpos identificados no reclamados en cementerios de la subregión. Por ejemplo, en el Jardín Cementerio Universal de Medellín.
En el Norte de Antioquia, por su parte, hay un universo de 1.383 personas dadas por desaparecidas y la Unidad de Búsqueda solo ha recibido 154 solicitudes de búsqueda. Por eso, si una familia tiene un ser querido desaparecido en el marco del conflicto armado o tiene información que aporte a la búsqueda, puede comunicarse con la línea 316 2823206.